viernes, 23 de enero de 2015

23 de Enero fin de la dictadura de Marcos Pérez Jiménez 
 

Un día como hoy, el 23 de enero de 1958, en la madrugada, Marcos Pérez Jiménez huye de Caracas en el avión presidencial rumbo a Santo Domingo (Dominicana), al no poder vencer la insurrección del pueblo y comprobar que se había derrumbado el respaldo militar que sirvió de base a su gobierno. En el avión, piloteado por el mayor José Cova Rey, acompañaron a Pérez Jiménez, su esposa, sus tres hijas, su suegra; Luis Felipe Llovera Páez, Pedro Gutiérrez Alfaro, Antonio Pérez Vivas, Raúl Soulés Baldó, y el testaferro Fortunato Herrera.
En las últimas horas de la noche anterior, Pérez Jiménez había recibido noticias desalentadoras. La rebelión popular en Caracas no sólo no había sido sofocada sino que se extendía al interior del país. Siguiendo las directivas de la Junta Patriótica, brigadas de jóvenes mantenían en jaque a la policía y a la Guardia Nacional, cuyos efectivos habían perdido el control de todos los sectores de la ciudad, con excepción del centro, alrededor del Palacio de Miraflores. Descargas de armas cortas y largas resonaban por los cuatro costados, y mientras los incendios se propagaban por Caracas, varias ciudades del interior se sumaban a la huelga general.
Las informaciones militares no podían ser peores. Los buques de la Marina de Guerra, que Pérez Jiménez suponía paralizados en el puerto de La Guaira (Vargas), habían zarpado y se encontraban en Puerto Cabello (Carabobo) aprovisionando de municiones a sus poderosos cañones de 40 mm. Las baterías antiaéreas y de campaña que había enviado para evitar su movilización se habían pasado a favor de la rebelión. La orden al batallón Carabobo de Valencia para ocupar las instalaciones navales de Puerto Cabello no surtió efecto, y su comandante aseguró a la base naval y a los buques de la escuadra que no cumpliría las órdenes de Miraflores. El comandante del batallón Bolívar informó a Pérez Jiménez del alzamiento de la Escuela Militar (Caracas), cuyos cadetes habían tomado posiciones de combate en los alrededores.
La gota que derramó el vaso vino del interior. Llovera Páez informó a Pérez Jiménez del alzamiento del cuartel de Barcelona (Anzoátegui). Rafael Pinzón preguntó: "¿Qué significación militar tiene ese alzamiento?". Llovera responde: "Militarmente muy poco. Ese cuartel tiene pocos efectivos, pero el problema es otro. Ese alzamiento obliga a las otras guarniciones a decidirse entre rebelde y leales. Es la guerra civil". Pérez Jiménez, que lo oye, está silencioso y sombrío. Ordena al edecán naval llamar a la Comandancia de la Marina: "Dígales que quiero parlamentar y que vengan a Miraflores". La respuesta no se hace esperar: "No es tiempo de parlamentar". Pérez Jiménez insiste. La misma respuesta. Llama ahora a la Escuela Militar: "Dígales a los oficiales que si hay algún problema que vengan a Miraflores. Hablando podemos arreglarlo". La respuesta es también negativa.
Mientras tanto a las puertas del despacho presidencial un grupo de numerosos oficiales pide órdenes a Pérez Jiménez para "aplastar la conspiración". El Presidente grita: "¡Esperen!". Ha enviado a Cova Rey a una ronda por los cuarteles para conocer la situación. El mayor regresa con malas noticias. "Los comandantes desconfían de sus subalternos y éstos de los jefes. Ya ni siquiera se puede contar con la lealtad del batallón Bolívar". Pérez Jiménez se derrumba. Ahora sólo piensa en huir. Envía a un oficial a preparar una embarcación en La Guaira. A los 15 minutos le dicen: "Imposible, el destructor Brión domina el Litoral". Entonces envía a Cova Rey a preparar el avión presidencial en La Carlota (Caracas) mientras envía un mensaje a la Comandancia de la Marina: "Dígales que yo me voy. Que me den tiempo a recoger a mi familia y salir para La Carlota".
Así se hace. Una hora después el avión presidencial, llamado popularmente La Vaca Sagrada, levantó vuelo hacia Santo Domingo.
Por Radio habló Fabricio Ojeda para exaltar la victoria del pueblo y el país descubrió quién presidió la misteriosa Junta Patriótica, que desde la clandestinidad había dirigido la heroica y victoriosa insurrección del pueblo y sus entonces Fuerzas Armadas.

Erika Rodriguez
Mileidi Fuentes
Facilitadoras


jueves, 22 de enero de 2015

22 de enero de 1803
Muere María Teresa del Toro, esposa de El Libertador


  Tal día como hoy, hace 210 años, murió en Caracas, víctima de la fiebre amarilla, María Teresa Josefa Antonia Joaquina Rodríguez del Toro y Alayza, esposa de Simón Bolívar, futuro Libertador de América, con quien apenas ocho meses antes había contraído matrimonio, el cual ya nunca volvió a casarse después de morir su esposa, consagrando su vida a luchar por la libertad suramericana.
Hija de Bernardo Rodríguez del Toro y Ascanio natural de Caracas, y de Benita de Alayza y Medrano, oriunda de Valladolid, España, había nacido en Madrid, el 15 de octubre de 1781. Estuvo profundamente vinculada a la sociedad caraqueña colonial, pues su padre era hermano del tercer Marqués del Toro, cuyo título heredaría el primo hermano de María Teresa, Francisco José Rodríguez del Toro e Ibarra, amigo íntimo de Bolívar.
Al morir su madre, se encargó de su padre y sus hermanos, a quienes educó y protegió. Asistía regularmente a los oficios religiosos y ayudaba a su padre y a su primo en lo relativo a la administración de bienes y haciendas.

María Teresa conoció a Simón Bolívar en Madrid, en 1800, habiendo éste sido enviado a España para continuar sus estudios. Su vida cambiaría definitivamente en la casa del Marqués Gerónimo de Ustáriz, a quien Simón Bolívar llamaba "tutor", y en cuya mansión residió por algún tiempo. Sería en ella donde habría de conocer a María Teresa, con quien estaba emparentado por varias líneas.
La joven cautivó a Bolívar a tal punto que, a pesar de su edad, rápidamente le declaró su amor. En agosto de 1800 María Teresa aceptó el noviazgo y su padre, al enterarse, les propuso esperar hasta que Bolívar, entonces de 17 años, cumpliese su mayoría de edad. Por motivo de que la herencia de Bolívar dependía de que éste tuviese un matrimonio bien asentado, éste reportaba con orgullo su noviazgo, describiéndo a María Teresa como «una joya sin defectos, valiosa sin cálculo».
Don Bernardo, el viudo padre de María Teresa, llevó a su hija a Bilbao y al poco tiempo, en marzo de 1801, decepcionado de Madrid, Bolívar se mudó a esa ciudad. De regreso a España, luego de una estadía en París, Bolívar le propuso formalmente matrimonio a María Teresa el 5 de abril de 1802. El padre de María Teresa, aplacado por el compromiso formal y, probablemente también por los bienes del novio, dió su permiso y bendición a la pareja.

Simón le propuso a María Teresa casarse aquel mismo año en el Puerto de La Coruña. En Santander, España, el 30 de marzo de 1802, Bolívar le otorgó poder a Pedro Rodríguez del Toro para suscribir en su nombre las capitulaciones matrimoniales.
En consideración de su distinguido nacimiento, su virginidad, sus cualidades personales y su disposición de dejar España para acompañar a Bolívar, los abogados del futuro libertador le pusieron un valor a su prometida de 100.000 reales, aproximadamente una décima parte de la fortuna de Bolívar, según las costumbres propias de la época, a las cuales Bolívar respondía con naturalidad, convencionalismos que en nada desmerecían el amor entre los novios.
Bolívar y María Teresa contrajeron matrimonio el 26 de mayo de 1802, en la primitiva Iglesia Parroquial de San José, en Madrid, después de haber obtenido permiso del Rey para hacerlo y de lograr la dispensa de amonestaciones. Al cabo de unos 20 días, que la pareja empleó en despedirse de los suyos, se trasladaron a La Coruña, y el 15 de junio de 1802 partieron hacia Caracas, desembarcando el 12 de julio en La Guaira.
Después de una corta estadía en Caracas se trasladaron a la "Casa Grande" del ingenio Bolívar en San Mateo. María Teresa enfermó poco después de "fiebres malignas", hoy día identificadas indistintamente como fiebre amarilla o paludismo, por lo que el matrimonio regresó a Caracas a su Casa del Vínculo, donde ella murió el 22 de enero de 1803. Trás ocho meses de matrimonio y dos años de noviazgo, Bolívar perdía así a su amada María Teresa.
Habiendo perdido a sus padres durante su infancia, María Teresa representó para Bolívar un último y definitivo intento de arraigo signado por la tragedia. El dolor causado por esta muerte inesperada y prematura lo llevaría a evadir en el futuro cualquier vínculo raigal. El juramento de no volver a casarse que pronunció entonces fue un acto de rebeldía contra del dolor al que puede conducir la entrega incondicional de los sentimientos.

Según sus propias palabras, esta tragedia personal le haría seguir el "carro de Marte" en lugar del "arado de Ceres". En 1828, analizando la influencia que la muerte de su esposa había tenido en él, Bolívar confesó: «Si no hubiera enviudado, quizás mi vida hubiera sido otra; no sería el General Bolívar ni el Libertador, aunque convengo en que mi genio no era para ser Alcalde de San Mateo».




Erika Rodriguez
Mileidi Fuentes
Facilitadoras

martes, 20 de enero de 2015

  Día Nacional del Pediatra


Han transcurrido 75 años desde que en 1939 se instauró en el país el Día Nacional del Pediatra, fecha que sería celebrada cada 20 de enero, según lo estableció la Sociedad de Puericultura y Pediatría en Venezuela.
El pediatra es un médico especialista cuyos estudios se centran en los niños, es decir estudian al niño sano mediante revisiones y pruebas, así como al niño enfermo. El periodo que abarca su labor va desde el nacimiento y se prolonga hasta la adolescencia.

En esta especialidad distinguen 5 periodos: Recién nacido (hasta las 4 semanas), Lactante (1 hasta 12 meses de vida), Preescolar (de 1 a 6 años), Escolar (de 6 a 12 años) y Adolescente (de 12 a 18 años).
En su labor el pediatra diagnostica y maneja daños, insuficiencias, condiciones genéticas y congénitas, cánceres y enfermedades disfuncionales.

Asimismo, está involucrado en la detección temprana de problemas como retrasos y desórdenes en el desarrollo del niño, en problemas de comportamiento, tensiones sociales, trastornos mentales, entre ellos la depresión y la ansiedad.

Salud y Revolución 

En la República Bolivariana de Venezuela se ejecutan más de 30 misiones sociales, vinculadas a la educación, alimentación, vivienda y salud, entre otras, con el propósito de cerrar la inmensa brecha social que dejó la denominada cuarta república.
Una de estos programas es la Misión Niño Jesús, bajo la concepción de la medicina preventiva, perteneciente al Ministerio del Poder Popular para la Salud, está destinado a brindar atención integral a las mujeres en la etapa de gestación, en articulación con los consejos comunales para el fortalecimiento de la salud materno infantil.

Creada por el Comandante Eterno, Hugo Chávez Frías, el 23 de diciembre de 2009, este misión es un articulador de políticas de salud, con la finalidad de fomentar la protección de la población a través de mecanismos gratuitos y que de forma oportuna lleguen a la colectividad, como lo contempla el espíritu y letra de la Constitución de la República.


Mileidi Fuentes
Erika Rodriguez
Facilitadoras

lunes, 19 de enero de 2015


19 de enero muerte de Juan Vicente Bolívar y Ponte

 

El 19 de enero de 1786,falleció en Caracas, Juan Vicente Bolívar y Ponte Andrade, padre del Libertador Simón Bolívar. Fue un activo propulsor de la independencia de Venezuela desde 1782 cuando, en compañía de Martín Tovar y el Marqués de Mijares, escribió a Miranda pidiéndole que viniera a salvar a sus paisanos de la tiranía española.
Nacido en La Victoria, estado Aragua, el 15 de octubre de 1726. Sus padres fueron el político aragueño Juan de Bolívar y Martínez de Villegas y la caraqueña María Petronila de Ponte Andrade y Marín.
Tenía el título de Marqués de San Luis, y heredó una importante fortuna que acrecentó con su administración. Entre sus propiedades estaban dos haciendas de cacao, una en los Valles del Tuy, y otra en Marón, cerca de Puerto Cabello; inmuebles en Caracas y La Guaira, así como un almacén donde se vendían telas finas; propiedades menores en Suata, Caicara y los Valles de Aragua; el ingenio de San Mateo, el Hato de Totumo, en Tiznados.
Desde joven se involucró en la carrera de las armas. En marzo de 1743, a sus 16 años, luchó como voluntario en las fuerzas del gobernador Gabriel de Zuloaga que defendieron el Puerto de La Guaira del ataque de la flota inglesa del almirante Charles Knowles, en el marco de la Guerra de la oreja de Jenkins (1739–1748).
Fue designado Procurador de Caracas en 1747 por el Cabildo de la ciudad, y nombrado Teniente de Gobernador por el Gobernador Ignacio Ramírez Estenoz en 1759. Para entonces fue Corregidor, Cabo a Guerra y Juez de Comisos de La Victoria y San Mateo, donde organizó los cuerpos de Milicias de Pardos. En 1765 fue Administrador de la Real Hacienda, designado por el Gobernador José Solano. En julio de 1768 fue designado Coronel del batallón de Milicias Regladas de los Valles de Aragua.
El padre del futuro Libertador fue el primero de los Bolívar en manifestar su descontento con el trato desigual que el régimen español daba a los criollos. En unión de Martín Tovar y del Marqués de Mijares, escribió una carta a Francisco de Miranda, en la cual le comunicaba su firme repulsa a los constantes tributos impositivos que ordenaba el Intendente español José de Abalos, y por la conducta del Ministro Galves, quien desde Madrid limitaba cada vez más la libertad de acción de los criollos, sometiéndolos a diversas clases de menosprecio.
En esa carta, aquellos tres rebeldes ofrecían a Miranda todo el apoyo necesario para que en nombre de ellos y de toda la Provincia de Venezuela, pactase y contratase con pleno poder y consentimiento, con el fin de buscar el apoyo de aquellas potencias extranjeras que tuvieran a bien auxiliarlos para conseguir la liberación de lo que calificaban como un cautiverio.
El 1º de diciembre de 1773 Juan Vicente Bolívar y Ponte contrajo matrimonio con María de la Concepción Palacios, con quien procreó cinco hijos: María Antonia, Juana, Juan Vicente, Simón y María del Carmen, fallecida al poco tiempo de nacer.
Falleció a los 60 años, cuando su hijo menor, Simón Bolívar, tenía apenas dos años.


Facilitadoras
Erika Rodriguez
Mileidi Fuentes

viernes, 16 de enero de 2015

                              


 
FELIZ DIA DEL MAESTRO


ESTE 15 DE ENERO DEL 2015 SE CELEBRO EL DIA DEL MAESTRO EN VENEZUELA, EDUCADORES QUE DEDICAN SUS VIDAS A IMPARTIR ENSEÑANZAS CON AMOR Y DEDICACION A SUS ALUMNOS.

EN LA IGLESIA NUESTRA SEÑORA DE REGLA DEL MUNICIPIO TOVAR SE REALIZO UNA MISA EN HONOR AL DIA DEL MAESTRO ORGANIZADA POR LA JEFATURA DE EDUCACION MUNICIPAL A CARGO DE LA LICENCIADA YGINIA CARRERO A LA CUAL ASISTIERON DOCENTES JUBILADOS, ACTIVOS QUE HACEN VIDA EN EL MUNICIPIO TOVAR Y SUS ALRREDEDORES.

DE PARTE DE LA FAMILIA INFOCENTRO VILLA DIGNIDAD LE DAMOS LAS GRACIAS A NUESTROS MAESTROS POR DARNOS TU TIEMPO, TU TALENTO, TU ENERGIA, TU COMPROMISO ES CON LA GENERACIÓN DE HOY, PARA CONSTRUIR UN MUNDO MÁS SUSTENTABLE, PARA LAS GENERACIONES DEL MAÑANA.
LOS INVITAMOS A SEGUIR CONSTRUYENDO LA PATRIA DEL AMOR, DE LOS VALORES, DE LA ENSEÑANZA, ESMERANDOTE SIEMPRE POR SER EL MEJOR.
-------------------------FELICIDADES MAESTROS DEL VALLE DEL MOCOTIES !!!
 


MISA EN HONOR A LOS MAESTROS EN LA IGLESIA NUESTRA SEÑORA DE REGLA


DOCENTES JUBILADOS 
DOCENTES DE LA ESCUELA ESTADAL LOMA DE LA VIRGEN UBICADA EN LA COMUNIDAD VILLA DIGNIDAD

 
LAS FACILITADORAS
ERIKA RODRIQUEZ
MILEIDI FUENTES











05 DE ABRIL DÍA INTERNACIONAL DE LA CONCIENCIA

El 5 de abril se celebra el Día Mundial de la Conciencia, una fecha promulgada por la ONU en 2019, y que consiste en promover una concienc...